Hoy os traigo un bonito poema de Maribel
amor
de las nueve lunas
Me dicen que es rosada la matriz
y que el túnel no es negro.
(sonríe la matrona asomando
como una chamana desde el triángulo
de sábana blanca y prosigue).
Debe de ser así.
Porque, pegada a mi pecho,
silenciosa pedías regresar.
Nueve lunas que respiramos
juntas,
solas,
felices.
Mis pies te llevaban por la ciudad
que ahora pisamos por duplicado.
Comíamos hojas verdes y tomates
y queso. Excesivo para ti, que hoy
no pruebas la ensalada cruda.
Cuántas horas meditando contigo,
acariciando en mi piel tu corazón
sensible al lenguaje de los delfines,
al delicado movimiento y a la respiración
que, como un ritual, compartíamos.
Lo sé hoy. Fui feliz nueve lunas
contigo. Como en esta hora,
cuando tus manos me atrapan
y la rosada matriz se contrae
y te añora.
Te quise un nombre sencillo, descargado
de lo religioso, como si ya te conociera.
Pero me sobrepasas, Maria, con tu gracia,
con la que a diario
me salvas de mí misma.
y que el túnel no es negro.
(sonríe la matrona asomando
como una chamana desde el triángulo
de sábana blanca y prosigue).
Debe de ser así.
Porque, pegada a mi pecho,
silenciosa pedías regresar.
Nueve lunas que respiramos
juntas,
solas,
felices.
Mis pies te llevaban por la ciudad
que ahora pisamos por duplicado.
Comíamos hojas verdes y tomates
y queso. Excesivo para ti, que hoy
no pruebas la ensalada cruda.
Cuántas horas meditando contigo,
acariciando en mi piel tu corazón
sensible al lenguaje de los delfines,
al delicado movimiento y a la respiración
que, como un ritual, compartíamos.
Lo sé hoy. Fui feliz nueve lunas
contigo. Como en esta hora,
cuando tus manos me atrapan
y la rosada matriz se contrae
y te añora.
Te quise un nombre sencillo, descargado
de lo religioso, como si ya te conociera.
Pero me sobrepasas, Maria, con tu gracia,
con la que a diario
me salvas de mí misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario